Los Lakers han alcanzado un nivel tan alto de eficiencia ante los Suns que el único factor negativo de estas finales de la Conferencia Oeste es que no los ayuda a prepararse para lo que podrían encontrarse más adelante.
Gasol fue la gran historia del Juego 2, en el que sumó 29 puntos durante la victoria de los Lakers por 124-112. Aprovechó la atención que los Suns le dedicaban a Bryant dejándolo solo por momentos. Hacía dormir a Amare Stoudemire anticipando sus pick-and-rolls, y luego rompía hacia el aro sin ser molestado. O victimizaba a Stoudemire con un sacudón y un tiro en salto Olajuwoniano. Anotó 14 puntos en el período final para permitir la escapada de los Lakers en un juego que estaba empatado después de 36 minutos.
El Juego 3 no es hasta el domingo, el mejor escenario para las rodillas doloridas de Bynum y Bryant. Y si pueden eliminar a los Suns al principio, está la promesa de tener aún más descanso antes de que comiencen las finales de la NBA en junio.
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